Emocióname

- ¿Cómo estás? -Le pregunté reiteradamente. - No lo sé. -Fue de nuevo su contestación. - ¿Cómo te sentías? -Volví a intentarlo - "Raro"… no sé cómo llamarlo. Llevábamos horas dando vuelta a la misma pregunta sin obtener una respuesta distinta. Era un chico brillante, un genio. Un compositor melómano con el que podías pasar

© Carmelaortuno.es 2014 - Diseñado por JordiGomis