Vive tu día.
Ayer regresamos de nuestra deliciosa escapada a Paris. La mezcla entre todo lo que tenía para ofrecernos esa preciosa ciudad y nuestra incansable curiosidad nos ha llevado a recorrer muchos kilómetros callejeando hasta que nuestras piernas ya no nos respondían. Sin embargo hoy me observo y sorprendentemente me siento más descansada que nunca. ¿Cómo puede