¿Y qué dirán?
Desde niño siempre había querido trabajar en la naturaleza. Pasaba horas observando los troncos de los árboles, clasificando sus hojas y percibiendo el cambio de matiz en el color del paisaje con cada estación. Se había imaginado mil veces recorriendo los senderos para enseñar sus lugares secretos a los visitantes y al fin había llegado